El arte contemporáneo es uno de los temas más complejos y ambiguos de nuestros tiempos. Se catalogó así a las creaciones artísticas elaboradas después de la Segunda Guerra Mundial hasta las que se desarrollan en nuestra actualidad. Se trata especialmente de las ideas del creador en torno a su investigación, lo que sugiere que en toda manifestación estética existe una trascendencia del significado original del artista. Estamos en un terreno sujetivo, de lo posible, donde el espectador debe asumir la responsabilidad de inventar “algo más”[1]
Las propuestas de los artistas contemporáneos poseen múltiples interpretaciones, las formas presentadas parten de la realidad que engendra paralelamente algo irreal que existe conjuntamente con la obra, después de la obra y a pesar de la obra[2]. Por ello se debe tener cuidado con el estudio de este tipo de arte, se configura según las condiciones de cada espectador. Aunque muchas obras parecen sencillas y de fácil creación pueden corresponder a un proceso de depuración de un punto de vista que demuestren ideas brillantes.
El proceso del arte se convierte en un metalenguaje que manifiesta su mismo significado. Juega con el inconsciente, la intuición y el instinto junto a la razón. Por encima de cualquier cosa, es la conjugación de una suprema contradicción y la superlativa contrariedad: es algo que, al convertirse en fin ensimismado trasciende su aparente finalidad[3]. El arte contemporáneo es una suerte de reapropiación discursiva de nuestro entorno.
En la actualidad los artistas exaltan en sus obras la idea metafórica, simbólica y abstracta, por ende su resultado suele ser implícito, interpretativo, confuso hasta misterioso. Para ese arte, el caso ideal y el postulado ideal radican en que la obra de arte presente una compensación orgánica entre la forma natural y la forma artística[4]. Debemos tomar en cuenta la dificultad y el cuidado que se requiere para realizar un análisis de la creación contemporáneo. ¿Cómo tener la certeza de lo que concluimos es irrebatible cuando hay tanta ambigüedad en el área?, sólo se puede tener una aproximación a la intensión del artista y a los secretos que esconde la obra.
El arte contemporáneo fomenta una ambivalente relación entre lo que es y lo que simula ser, entre lo que quiere ser y lo que disimula ser[5]. Es una dualidad que se presenta como una cualidad virtuosa, sin embargo produce serios conflictos para su interpretación. La obra y el espectador tendrán las mismas exigencias creativas, el primero para la producción y el segundo debe descifrar el contenido implícito en las formas. Se produce la reciprocidad entre ambos.
Aun no existe un concepto exacto para el arte actual, se le dan muchos adjetivos calificativos vanguardista, simbólico, incierto, son los más aludidos. Su origen tiene varias tesis, unos afirman que nace con Cézanne, van Gogh y Gauguin; Otros aseveran que su inicio fue con la revolución cubista u otros que responsabilizan a Kandinsky. Finalmente y el mas aceptado por los especialistas, es el que sostiene la teoría sobre su aparición en los alrededores de la segunda guerra Mundial[6].
Sin embargo, cabe señalar que el procedimiento para estudiar el arte de cualquier época es el mismo que exige el contemporáneo.
Es necesario realizar una contemplación detenida, analizar el proceso creativo. Las repercusiones de la obra en su tiempo y su valoración histórica. Pero, ante todo, es muy importante reflexionar de manera general sobre lo que ha significado el arte en épocas pasadas, es decir, la teoría del arte: la mayor causa de incomprensión del arte contemporáneo deriva de la suposición de que todo el arte anterior obedece a unos principios únicos que, repentinamente, se hubiesen cambiado en el siglo XX.
El resultado del creador posee autonomía total, tiene criterio propio, ya no refleja una dependencia directa del mundo sensible ni refleja contenidos convencionales, sino que busca novedad y fuerza, contundencia y espiritualidad, resonancia e impacto, misterio y desafío. Buscar ser ella misma y no otras cosas[7]. Infinidades de interpretaciones lograran las propuestas artísticas, ya que las percepciones de cada espectador serán disímiles, dependerá de las motivaciones, aspiraciones, conocimientos y necesidades que éste manifieste, como las alteraciones perceptivas que se van sufriendo con el tiempo.
El arte de los últimos años se incorpora en un contexto libertario, donde el objeto no posee un sentido hasta que el artista lo inserta e interacciona con el paisaje, sea material, inmaterial o urbano, donde el creador se encuentra dentro de la composición, modificándola con su discurso interpretativo. Es el pensamiento que encierra la obra donde verdaderamente radica la creatividad artística. Por otra parte, en el arte contemporáneo, como en la vida, valores como la espontaneidad o la ingenuidad no son fáciles de conseguir[8].
El arte tiene un contexto independiente y de aspectos complejos para su comprensión, debido a la atracción que siente el ser humano por ciertas formas y colores que la creación contemporánea descontextualiza, presentando otras formas de ver el mundo. De este modo, el acto creativo no puede concebirse de otra manera.
El proceso de vinculación con las manifestaciones artísticas comprende tres fases generales: la aproximación, la comprensión y la crítica[9]. Como afirma Víctor Guedez, el arte debe ser visto, no necesita ser entendido debido a que no es una ciencia exacta. A medida que se educa el ojo, el espectador comienza a sentir todas las emociones que lleva consigo la obra, no debe poseer belleza para poder conmover, por ello surge la estética de lo feo, trayendo como consecuencia de la nueva percepción del arte.
En Palabras de Worringer el arte contemporáneo no emana de la evidencia de un poder, sino que surge de un querer. La instancia decisiva última no es la calidad del poder, sino la calidad más difícilmente apreciable del querer[10]. En este sentido, se desarrollan diversas manifestaciones, grupos que aparecen de manera innovadora. Los artistas se preocupan cada vez más por lograr una concepción. Las calles de las ciudades son sitios intervenidos estéticamente. Seminarios, conferencia y hasta talleres se han dictado en torno a esta situación, tanto en Europa como en América latina.
Desde hace poco menos de cuarenta años el arte ha significado un acrecentamiento en la diversidad de medios expresivos,
tanto en la interrelación entre los géneros como en la naturaleza de la composición dentro de cada uno de ellos, inaugurando de este modo una fase apasionante de la contemporaneidad artística, la cual constituye el final de un modo de entender la modernidad y el inicio del otro, por otra parte consecuente con los cambios cognitivos occidentales que se producen en paralelo[11].
Existe una preocupación por el medio en que vivimos, de ello han surgido diversas corrientes, entre las que podemos mencionar el graffiti como un antecedente de lo que actualmente es el trabajo de Federico Ovalles Ar. quien con sus intervenciones transforma contundentemente la relación del hombre como medio y genera nuevos paisajes insospechados por su artificiosidad y zafiedad[12]. Con éste genero comienza su labor artística que va evolucionando de manera experimental, complementa diversos medios expresivos siempre ahondando el tema urbano, por lo que se cataloga como artista callejero o del street art (término inglés).
El estilo en su concepción más amplia y literal son todas las representaciones artísticas desarrolladas de manera ilegal, incluye tanto al graffiti como a otros tipos de intervenciones estéticas realizadas en la vía pública. Sin embargo, desde mediados del los años 90 el término street art o su equivalente de Post-Graffiti se vienen usando para describir el trabajo de un conjunto heterogéneo de artistas que han ido desarrollando acciones artísticas en la calle mediante el uso de plantillas, posters, pegatinas y otras técnicas y códigos que se alejan del graffiti[13].
Esta nueva concepción motivó a los artistas a intervenir las calles de las ciudades, los espacios públicos como su expresión, siendo efímeras o permanentes. Se produce debido la transformación del medio físico con el transcurrir de los años, la superpoblación, la variación del paisaje, el caos urbano, es acondicionado y reapropiado por el artista para convertirlo en forma discursiva y siguiendo el patrón modificante del paisaje urbano. Ya no se trataba de subsumirse en el natural, en el urbanismo y en la arquitectura, como antaño, sino de aliarse con ellos bidireccionalmente[14].
Federico Ovalles Ar, artista venezolano, desarrolla su trabajo plástico a través de manifestaciones urbanas, acentúa las transformaciones que surgen en las principales ciudades, presentando al habitante el cambio que en ellas se generan, logra de esta manera afinidad entre el paisaje natural y el espectador. Afirma: Trabajo con todo lo que me permanece en la urbe. Me considero un artista urbano porque me valgo de todo lo que está en las ciudades, mi inspiración ha sido la grafía que hay en la urbe: grafitos, publicidad y todo tipo de textos en la ciudad[15].
Es representante del arte contemporáneo venezolano, su dedicación lo ha llevado a ser ganador Un ganador del primer premio de la novena edición del Salón Jóvenes con FIA 2006, por su trabajo de intervención sobre un carro robado (imagen 4). Reside y trabaja en Caracas, ciudad influyente en su obra, realiza cursos de dibujo, pintura y escultura en la Escuela de Artes Visuales Cristóbal Rojas, luego en el Instituto de Estudios Superiores en Artes plásticas Armando Reverón. Tomo clases de video art, arte y computación, grabado y es director de la línea de ropa GHETTO.
Utiliza elementos citadinos como lenguaje para lanzar sus pinceladas [Ver Figura 1], realizar sus intervenciones [Ver Figura 2], registrarlas fotográficamente [Ver Figura 3] y realizar videos [Ver Figura 4]. Este joven artista deje entrever sus capacidades creativas a través de los diferentes medios de expresión plástica, manifestando su ambición por ello.
Para el crítico Perán Erminy, las obras de Ovalles Ar son
variantes que mantienen una lógica formal que las cohesiona y al mismo tiempo las anima. Todas son auto referenciales. Los signos se significan a sí mismo. Las letras se vacían, se desconectan, se abandonan al azar. No intentan ser palabras ni ideas, dejan de significar, son residuos, huellas fantasmales, fuera de lo escritural y de lo lingüístico.
Su propuesta deriva de su valoración a la saturación urbana (los transeúntes, las miles edificaciones que nos rodean, los vehículos, los desechos, forman parte de nuestro entorno que se destruye y reconstruye), donde constantemente estamos inmersos y nos invade cada vez más, reapropiándose de ella.
Las ciudades y su progreso establecen un símbolo paradigmático donde esta generación ejerce su acción y manifiestas sus efectos. La arquitectura es primordial dentro de la obra de Ovalles Ar, tanto en soporte como a nivel conceptual refiriéndonos a la megalópolis, al crecimiento urbano acelerado. La pintura de Ovalles Ar es un proceso discursivo que tiene como soporte fundamental estructuras arquitectónicas.
Para el propio artista la situación en que se ubica su propuesta refiere a
la morfología viva y constante de la ciudad de Caracas, que opera como un fenómeno casi imperceptible. Al caminar nuevamente por alguna calle o espacio público, nos damos cuenta de que algo ya ha cambiado; la demolición de un edificio o la construcción de otro, negocios que no estaban aparecen suplantando los de siempre, nuevos sentidos en la vías, así como toda su señalización, nos muestran nuevas y distintas caras de la misma ciudad que seguimos habitando[16].
Por medio de su obra, Ovalles Ar se acerca a la problemática urbana en general. Durante su estadía por Londres, desarrolló su lenguaje actual y realizó algunos trabajos como la intervención Sin Titulo (2005) [Ver Figura 5], entre otros. Trabaja con materiales que conceptualmente no se desprende de su propuesta, como el cartón, obteniendo estructuras llamadas por él “pararquitectonicas o “anarquitectonicas” [Ver Figura 2]. En su llegada a Caracas advierte el cambio que se ha producido desde su partida, establece un discurso plástico que permite tomar en consideración elementos tan comunes como
los dispositivos mediante por los cuales los buhoneros muestran sus mercancías o las frágiles estructuras que sirven de hogares a los indigentes y por supuesto los múltiples complejos habitacionales construidos debajo de puentes, en quebradas y cerros de la ciudad capital, desafían cualquier intento de orden o estructura de planificación. La retícula original de la ciudad de Caracas se desperdigó en un crecimiento desordenado; donde es evidente el triunfo del caos sobre la razón[17].
Como oposición a la saturación, el caos, lo agresivo, etc. Realiza una serie de obra cubriéndolas con pintura blanca. Debido a la ampliación del espectro de colores, a este pintor le gusta trabajar con los tonos fluorescentes y brillantes, sin dejar de insistir con el blanco. Y en el caso de los materiales, utiliza sprait, materiales industriales y rodillos para realizar sus obras[18].
Asimismo cabe destacar la intervención de la escritura en su obra, como podemos observar en la imagen número uno y en el video, signos alfabéticos, números, letras, etc. La grafía de Ovalles Ar es compleja, es indescifrable ya que el artista se encarga de yuxtaponerla de manera que se confundan, este impedimento para entender es consecuente de la evolución del arte, en consecuencia el contemporáneo. El artista plantea su estética, descifrable o no, tiene un sentido simbólico, una significación conceptual dentro del territorio del arte.
La rutina del habitante urbano, que lo lleva al desinterés por el paisaje es el contenido fundamental que integra la propuesta plástica de Federico Ovalles Ar quien logra, con sus intervenciones en lugares públicos ser parte de la gran lista de los artistas contemporáneos, se desliga de los cánones estéticos y se incorporan a la realización de artificios, proponiendo un lenguaje particular, con códigos y símbolos que tendrán múltiples interpretaciones y variantes según el contexto, la cultura, el momento en que se examine.
Figura 1.- Untitled, Técnica Mixta sobre tela, 110 x 120 cm., 2000
Figura 3.- Intervención Urbana (Caracas), Técnica Mixta, 3,30 x 4,00 cm. 2005.
Figura.- Intervención sobre carro robado, Video DVD, 03:00 min. 2006
Figura 5.- Intervención en Londres, 2005
Bibliografía
AAVV. Arte Público: Naturaleza y Ciudad. Fundación César Manrique, Madrid, s/f.
AAVV: La Enciclopedia del estudiante. Historia del Arte. “Teorías del arte: Cinco cuestiones habituales sobre arte contemporáneo. Santillana, Buenos Aires, 2006.
Víctor Guedez. Aproximación y Compresión del Arte Contemporáneo. Fundación Polar, Caracas, 1994.
Wilhelm Worringer. Problemática del arte contemporáneo. Buenos Aires, 1881.
Fuentes Electrónicas:
El Nacionalista. Diario de Guarico: Treinta pinturas relejan la visualidad urbana. (En Línea)
http://www.elnacionalista.com.ve/index.php?option=com_content&task=view&id=102&Itemid=2 16/02/2008
Wikipedia: Arte callejero. (En Línea)
http://es.wikipedia.org/wiki/Arte_callejero 17/02/2008
[1] Víctor Guedez. Aproximación y comprensión del arte contemporáneo. pp. 40
[2] Ibíd.
[3] Ibíd. pp. 41
[4] Wilhelm Worringer. Problemática del arte contemporáneo. pp. 11
[5] Víctor Guedez. Ob. Cit. pp. 44
[6] Ibíd. pp. 46
[7] Ibíd.
[8] AAVV. Teoría del arte: Cinco cuestiones habituales sobre arte contemporáneo. en La enciclopedia del estudiante. Historia del Arte. pp. 269
[9] Ibíd. pp. 73
[10] Wilhelm Worringer. Ob. Cit. pp. 29
[11] Gloria Moure. “Creación plástica en el espacio urbano” en: Fundación César Manrique. Arte Público: Naturaleza y Ciudad. pp. 101.
[12] Javier Mederuelo. “Introducción”. en: Fundación César Manrique. Arte Público: Naturaleza y Ciudad. pp. 11
[13] Wikipedia: La enciclopedia libre. s/p
[14] Gloria Moure. Ibíb. pp. 108.
[15] Ángel Ricardo. En El Universal. El espacio de transito en libre y allí deberíamos opinar más. s/p
[16] Federico Ovalles Ar. Ciudad Borrador: Morfología de la ciudad, lecturas y relaciones. pp. 1
[17] Ibíd.
[18] AAVV. Diario del Guarico: El Nacionalista. Treinta pinturas reflejan la visualidad urbana. s/p
Caracas, Febrero 2008
DIZH
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